Un TODO, seguir siendo yo misma, caminar con paso segura, hacer y deshacer, no tener dudas y a un mismo tiempo..
Tan solo con Vos todo esto cambia a Su voluntad sin darme cuenta de nada.
Podría rogar y suplicar para camelar, pero hacer tal cosa no está en mi naturaleza, de tal forma y manera que cuando surge es de forma espontánea, sincera y desde muy adentro.
Pero.......
En un paseo de los muchos que gustamos de dar, en esta ocasión sin saberlo y sin costar palabra alguna, iba muy atadita y sin atar, sin correa alguna pero de muy corto, sin que a Vos le costase esfuerzo alguno y mientras caminábamos sentí la necesidad de agradar, de sorprenderle con algo en concreto.
Fue entonces cuando supliqué, le rogué me permitiera ser yo, sin darme apenas cuenta y odiando como odio el llanto, de repente comencé a llorar silenciosamente mientras le rogaba, mientras parados en la acera le rodeaba la cintura y escondía avergonzada la cabeza en su pecho, casi sin poder articular palabra.
Vos me tranquilizasteis y todo quedó en nada, en una obediencia absoluta.
No soy sumisa de pataleta, ni caprichosa, de ser así no estaría al lado de mi DUEÑO.
DUEÑO, KAIR, ¿Cómo me habéis robado el alma, cuando tenía su coraza?
dulce_lara{D_A}
